Considero a la naturaleza la mejor artista, pues crea formas únicas e irrepetibles. Dudo mucho que algún día el humano pueda repetirlas. A eso, sumándole la gran variedad de colores que combina en sus lienzos, es maravilloso. Un privilegio para nosotros poder deleitarnos, contemplando cada una de esas formas y colores.
La foto que traigo esta vez al blog se trata de nuevo del Nevado de Toluca, pero una vista más profunda de él. En esta foto podemos contemplar el camino que lleva del cráter a la cima del volcán. Unos colores apagados, pero al mismo tiempo tranquilizantes que contrastan a la perfección con el gris y blanco de las nubes junto con el azul del cielo.
La flora que se adueña del volcán no toma una tonalidad verde como comúnmente. Pero, lo maravilloso de eso es que pareciera que los colores están perfectamente planeados por algo o alguien para contrastar y así otorgar armonía visual.
Naturalmente hablando, este lugar ha sido uno de los más increíbles que he logrado conocer y sin duda alguna un excelente lugar para una buena fotografía.
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