A lo largo de mi vida he tenido la oportunidad de conocer diversos lugares de México. Uno de ellos es Oaxaca. Y debo admitir que yo no tenía muchas expectativas de él, pues no llamaba mi atención. Pero al momento de estar ahí, mi forma de pensar cambió totalmente. Yo conocía una parte de México muy diferente a lo que encontré en este lugar. Es un ambiente diferente de lo común. Éste presenta una amplia variedad de ecosistemas, suelos, especies de plantas y animales que no logras ver en otro lugar; esto hace de Oaxaca un lugar increíble. Con un maravilloso color verde.
Conocí parte de la sierra y de la jungla que sin duda está llena de vida. Tal vez no sea un lugar con señal de teléfono o siquiera luz eléctrica, pero tiene mejores cosas que ello. Ahí al sacudir un enorme árbol caen de dos a tres frutas distintas llenas de sabor; cosa que nunca había podido tener la oportunidad de ver en persona.
La gente de la zona es muy alegre y llena de vida que para mí, es de admirar. Pues pese a sus condiciones de vida que no son del todo favorables siempre encuentran la manera de salir adelante. En esa zona se da mucho el café y el chocolate; este último es una de mis cosas favoritas en el mundo. Tal vez muchos hayan probado el chocolates de marca, pero sinceramente el chocolate de Oaxaca es incomparable.
Volviendo al tema original, al caminar por esas zonas es complicado no detenerte. Observar el sin fin de vistas preciosas y maravillosas que crea la naturaleza. Decidí capturar una de las que más me gusto; en esta ocasión, el color verde es el protagonista de mi foto. Mires a donde mires la vegetación es la reina de la foto. Este es el maravilloso color verde de Oaxaca,
Si te gusta mi trabajo te invito a que te des una vuelta por mi Instagram. También puedes visitar mis últimas entradas: La magia de los patrones y Un pequeño charco de agua. Subo muchas cosas más, hasta el próximo post 😊❤✌.