Siempre desde muy pequeño he sido amante de viajar, esto se debe originalmente a mis padres. Cuando yo tenía un año de vida mi padre se ganó un viaje a Cancún. Pues ese viaje literalmente fue el primero en mi vida, lo cual ocasionó que desde muy pequeño yo tuviera cierta atracción por los viajes.
Me gusta mucho esta fotografía ya que, de cierta manera, refleja ese gusto por los viajes. La ironía es que fue tomada en Cancún 19 años después. Es realmente maravilloso viajar, ya sea a un lugar lejos de casa o a tan solo unos minutos de ella. Lo verdaderamente importante es poder disfrutar cada minuto del viaje.
Al salir de nuestra casa puede decirse que salimos de nuestra zona de confort. Pero, al viajar puedes encontrarte con diversas cosas o situaciones que harán que todo valga la pena.
Desde paisajes increíbles. Sabores gastronómicos asombrosos o aventuras inigualables entre muchas cosas más. Cada lugar tiene una historia y una aventura aguardando por ser descubierta. Pero no solo eso, pues las personas que nos acompañan en esos viajes se vuelven aún más cercanas a nosotros al compartir esas aventuras.
¡No temas a salir de casa! Disfruta hasta la aventura más pequeña, junto a quienes te rodean. Pues como dice mi padre, “hay más tiempo que vida”. Así que solamente disfrútalo.