Vaya que la felicidad es algo que todos deseamos, sin embargo es algo muy complejo. Nos preocupamos tanto en alcanzar una verdadera felicidad que nos quedamos en el intento; nadie desea sufrir en lo más profundo de su ser, la mente es quien puede inducirte pensamientos destructivos.
Acaso te has preguntado ¿soy verdaderamente feliz? puedo decir, aunque con poca certeza que probablemente tu primer respuesta fue un sí, que posteriormente recibió un montón de inquietudes sobre tu vida misma. Las personas te pueden decir que nadie es verdaderamente feliz, porque siempre habrá algo o alguien que no los dejará tranquilos. Su problema es creer que la felicidad es superficial, que tiene que ser influenciada por algo externo, cuando la verdadera felicidad existe dentro de nosotros.
Tu felicidad depende de ti
Nunca olvides que lo que es ajeno a tu cuerpo-mente, no te brindará una verdadera felicidad. Hacer tu dicha dependiente de algo te traerá más desgracias de las que podrás soportar. Considero que si deseas ser feliz, debes dejar pasar aquellos pensamientos destructivos, que no son más que simples falacias creadas por ti; aquieta tu mente de estos pensamientos, y recibe pensamientos venturosos.
Practica la compasión en tu vida, con cualquier ser con el que te encuentres. Todo los seres sufren, y a la vez no desean sufrir. ¿Por qué no ayudarlos a alcanzar su felicidad? tal vez así encontrarás la tuya, pues por naturaleza somos seres compasivos. Alguna vez leí una reflexión verdadera, mirar a los demás como seres humanos similares a nosotros, sin diferencia de creencias e ideales hará que la verdadera compasión despierte en nosotros, nos daremos cuenta que todos buscamos la felicidad, y nadie quiere sentir dolor.
Encuentra tu felicidad
Hace ya unos días, partí con mis amigos a la prehispánica ciudad de Teotihuacán, un lugar lleno de historia y símbolo de mi país. Íbamos camino hacia la Pirámide de la Luna, misma que puedes ver en esta foto, aunque no me percaté que una tercia de turistas también fueron capturados por mí. Nos damos cuenta que van hacia algún lugar, todos vamos hacia algún lugar. Caminos distintos, pero todos buscamos la felicidad; encuentra tu camino y llénalo de compasión.
Quiero recordarte que soy una persona que tiende a reflexionar, pero también a equivocarse. Agradezco que hayas llegado hasta aquí, pero nunca olvides reflexionar sobre tu vida, es menester que pienses y medites sobre tu existencia en este mundo. Si te ha gustado esto que he escrito de la mano de una fotografía, me gustaría que nos dejases un comentario.
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